Nosotras, las hermanas de la Orden de San Basilio Magno,
continuamos la Misión de Nuestro Señor
y Salvador Jesucristo con su pueblo, en los diversos
países y culturas donde lo servimos.
EL
NOS INVITA A QUE SEAMOS
SU
PRESENCIA ORANTE: Respondemos con amor a su llamado,
consagrándonos a una vida de oración y
compromiso, para que el mundo, viéndonos, Lo
vea, escuchándonos, conozca Su voz y conociéndonos,
Lo conozca.
ws him.
SU
PRESENCIA SANADORA: Respondemos con bondad y hospitalidad
a aquellos que sufren necesidades en su cuerpo y en
su alma, ofreciéndonos de modo especial, para
reconciliar a los que viven en el sufrimiento y tinieblas,
por estar separados de Cristo y de Su Iglesia.
SU
PRESENCIA VIVIFICANTE: Respondemos con generosidad y
prontitud a fin de compartir sus dones y su bondad con
quienes nos relacionamos en la vida, para que ellos
también lleven una vida más plena y sean
transfigurados a su Imagen.
Unidas
en esta misión común vamos adelante, difundiendo
el Reino de Dios aquí en la tierra.
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